La dieta MIND es una dieta creada para proteger la salud del cerebro y reducir los riesgos de padecer enfermedades como demencia o Alzhéimer. En la medida que apuesta por una alimentación sana, la reconducción de hábitos que propone también lleva a una pérdida de peso sana y paulatina.
¿Qué es la dieta MIND?
Su nombre, MIND, proviene del acrónimo en inglés de Mediterranean-DASH Intervention for Nurodegenerative Delay, es decir, dieta de intervención para el retraso neurodegenerativo. Y en realidad, en ella se unen factores alimenticios de la dieta DASH, dieta creada para la disminución de la hipertensión (ver aquí), a la que se suman elementos de la dieta mediterránea (ver aquí).
Según estudios de universidades como la de Chicago, hacer la dieta MIND puede disminuir el riesgo de padecer enfermedades cerebrales entre un 53 y un 35%, en función de la fidelidad con la que se siga. Además, en la medida en que se basa en dos de las mejores dietas del mundo (la DASH y la mediterránea), y promueve una alimentación sana y equilibrada a largo plazo, la dieta MIND también induce a la adecuación hacia el peso ideal (ver aquí) de las personas que la siguen.
¿Qué alimentos promueve la dieta MIND?

La dieta MIND se centra en diez grupos de alimentos destacables por sus propiedades neuroprotectoras, que a su vez, resultan bajos en grasas o aportan los ácidos grasos insaturados más necesarios para nuestro organismo. Estos alimentos son:
- Verduras de hoja verdes, como espinacas, col rizada, acelgas, etc. O, en definitiva, verduras ricas en folatos.
- Otras hortalizas. Aunque se destacan especialmente las verduras de hoja verde, el resto de hortalizas también son esenciales en la dieta MIND. Así, se recomienda la ingestión diaria de una ensalada y, al menos, otra hortaliza para una protección neurodegenerativa efectiva.
- Arándanos. Aunque todas las frutas son esenciales en una alimentación equilibrada, la dieta MIND recomienda especialmente los arándanos por sus efectos en las funciones cognitivas. Otra fruta que destaca en este sentido son las fresas.
- Frutos secos, pescado y marisco, por la riqueza de ácidos grasos poliinsaturados que aportan al organismo.
- Cereales integrales, ya que, junto a las verduras de hoja verde, son alimentos ricos en folatos.
- Legumbres, por ser una fuente de proteínas baja en grasas, se recomienda su ingestión entre dos y tres veces a la semana.
- Pollo, como carne magra y fuente de vitamina B12, sólo presente en alimentos de origen animal.
- Aceite de oliva, como fuente de vitamina E, que ejerce un efecto protector al disolverse en las membranas de las neuronas.
- Vino, en pequeñas cantidades (una copa al día), se han probado sus efectos beneficiosos (ver aquí).
Por otro lado, la dieta MIND especifica que hay que limitar el consumo de carnes rojas, lácteos (especialmente quesos y mantequilla) y dulces, a la vez que hay que eliminar o limitar mucho métodos de cocción poco sanos como las frituras, además de los productos alimenticios ultraprocesados.